A  VUELAPLUMA

LA OPINIÓN
de Javier Pipó
 

Educacion, Andalucía y otras consideraciones

14 de Marzo de 2013

 

El largo, inconcluso y permanente debate sobre la bondad o maldad del hombre en convivencia, quizá podría resumirse en un aserto provisional: una sociedad de hombres libres solo es alcanzable si convergen simultáneamente un sistema educativo integral y un orden jurídico de leyes sabias que se cumplan.

Si ese desideratum se contrasta con la dramática situacion de esta hermosa tierra andaluza, de inmediato podrá comprobarse como un régimen politico con más de treinta años de populismo retardatario ha logrado un sistema cerrado, perfectamente delimitado, controlado hasta en ínfimos detalles que está conduciendo a una población desorientada hacia la mediocridad y consecuentemente a ínfimos niveles de desarrollo.

Y es que en la Andalucía de permanente gobierno socialdemócrata se está en la combinación de dos factores demoledores. Una educación basada en valores de mínimo común denominador, donde la igualdad por abajo se cultiva con esmero, es decir, la igualdad como valor superior es devaluada. Y, la presencia avasalladora de una poderosisima máquina de propaganda encabezada por el nefasto canalsur, instrumento gigantesco de fabricación continuada de desinformacion y tópicos que con eficacia devastadora garantiza la manipulación sistemática del hombre masa, preparado a conciencia en el sistema educativo antedicho.

Este entramado no es nuevo. Lleva funcionando más de tres decenios y ha modulado a más de dos generaciones, como los perversos nacionalismos vasco y catalán. Es el laboratorio andaluz, que exporta ideas de gobierno, como en su día practicaron regímenes similares llámese PRI o populismo peronista. Pero ahora, con el perejil del comunismo bien instalado, tocando un enorme poder y exigiendo la implantación en Andalucia del chavismo venezolano. Implantación de lo que dicen defender como aprovechable, que es casi todo. Chavismo que fascina por igual a Bildu y a IU y que refrescará el estalinismo latente que anida también en ERC. Todo quedará integrado en esa gran confederación que se fabrica en servil vasallaje de CIU, PNV y PSOE. Los nuevos tontos útiles, que tanto chiste provocaba en los años cincuenta y sesenta del franquismo.

No podemos perder el rumbo. Debemos seguir defendiendo la democracia, basada en ciudadanos educados y no mediocres, libres y no dependientes y subsidiados.

Mientras, tendremos que seguir soportando como en Andalucía se puede seguir aprobando cursos escolares por vía administrativa o que profesores exigentes pueden seguir siendo perseguidos si niegan los aprobados políticamente correctos o estadísticamente necesarios.

Para la continuidad, de al menos otros veinte años, ya está preparada la nueva generación  de jóvenes socialistas, mucho más sectarios, ideologizados y vehementes que sus antecesores. Véase la joven Susana Díaz, instalada en una tapada Vicepresidencia de la Junta reclamando para su generación la dirección política, hasta divisar los brotes negros del socialismo real. Es lo que hay. No tenemos, ni siquiera, un Capriles que animar.