COMENTARIO
EL CATALANISMO POSIBLE
Javier Pipó Jaldohttp://elblogdejavierpipo.blogspot.com
24 de Septiembre 2012
Parecen ser dos las grandes cuestiones
de actualidad que nos entretienen o angustian en función de la posición
adoptada ante una realidad algo asfixiante y poco previsible.
En primer lugar el espinoso tema catalán, pero evitando sus muchas similitudes con el
vasco que dejaremos para otro día. En segundo lugar, pretendo hacer
referencia al famoso rescate y la resistencia del Gobierno a cursar la
correspondiente petición a las autoridades europeas. Cuestión que aplazaré
hasta el próximo Comentario. Intencionadamente dejo al margen el Informe
Foessa 2012, conocido como informe sobre la pobreza en España que pone los
pelos de punta pero intimamente ligado a las cuestiones expuestas.
Además pretendo constituya la AZOTEA del próximo jueves.En consecuencia abordo, aunque sea con brevedad, la cuestión catalana.
En la AZOTEA del pasado jueves hice una muy ligera incursión sobre el catalanismo intelectual – tan alejado de la saga pujolista – para concluir que Arturo Mas solo reclama la llave de la caja.
Prat de la Riba, Almirall, Torras i Bages y otros teóricos del catalanismo nunca fueron independentistas. Y eso es tan cierto como que desde el antiguo Condado al Reino de Aragón y de ahí a los Austrias o los Borbones, Cataluña jamás gozó o sufrió la independencia.
Pero claro, eso es solo una parte de la realidad. El camino emprendido por el catalanismo es claramente centrífugo y terminará por desestabilizar la Nación entera. Es ya fuerza imparable que se ha cultivado intensamente durante los ultimos 35 años en la escuela, la familia, las organizaciones sociales y políticas, la cultura, la Iglesia católica y las finanzas.
Ahora ya maduró. Pero maduró en el peor momento de Europa desde la Gran Guerra, en crisis no solo económica sino asimismo de identidad. Mucho peor momento para la Nación española, en proceso acelerado de empobrecimiento y que además nunca encontró su propia identidad.
El Sr. Mas simplemente aprovechó la extrema debilidad de la Nación y el extraño e irritante sonambulismo del Gobierno para intentar una maniobra tan miserable como imposible: una caja aparte y la llave. Desde luego podía haberla conseguido y entonces acumular méritos y facilidades en aras de la segunda y definitiva embestida.
Pero ojo, Cataluña es viable como estado independiente, como cualquier otro y quizá mejor que otros. La Unión Europea terminaría por aceptar su integración antes o después. Es solo cuestión de capacidad económica no de dimensión territorial. Cataluña tiene un extraordinario fondo cultural, científico, tecnológico y financiero. Acusaría en su PIB la secesión, pero también España. Luego, todo volvería a su dimensión. Aunque con parámetros en pérdida y además irrecuperables.
De manera que ahora el Sr. Mas, su entorno catalanista y el pueblo catalán en su mayoría, esperarán mejor momento pero manteniendo la tensión y la provocación de forma permanente, haciendo de maquetista de la estructura de su futuro Estado.
Mientras, el Gobierno debe plantearse una profunda revisión constitucional, dibujando un federalismo adecuado al tiempo y la realidad.
El 26 de abril publiqué en el Diario Córdoba la columna titulada EL FEDERALISMO ¿POR QUE NO? que podría suscribir y transcribir ahora en su totalidad porque goza de plena actualidad.
Es operación que debe hacerse conjuntamente con el Partido Socialista, pero ya empezaron algunos iletrados progresistas a ponerle apellidos, como ese tan vacío y desconocido en la ciencia política de “federalismo cooperativo” o el maragaliano "federalismo asimétrico". Desde luego muchos deberían leer el magnífico estudio que sobre “Los Rostros del Federalismo” recientemente publicó el Profesor Blanco Valdés.
Con la solución federal, compatible con una monarquía a lo “austria” quedaría seguramente resuelto el gigantesco problema de la financiación del Estado que nos está colocando al borde del precipicio. El resultado lo plasma el Informe FOESSA, pero de eso hablaremos otro día.
Yo realmente no veo que esta discusión sobre el federalismo sí o no nos lleve a ningún lado, porque los nacionalistas no estarían dispuestos a aceptar un federalismo real con la premisa de la igualdad entre los federados. Entonces ¿para qué? Y en este momento de crisis brutal ¿quién va a poner un euro en un país que ni siquiera sabe que forma va a tener su Estado en el medio plazo? ¿Hay algún país en Europa que esté discutiendo esto?
ResponderEliminarQuizá deba comenzarse por comentar que cuando se habla de federalismo no debe pensarse en forma política unica: Estado Federal. En absoluto porque la realidad nos señala una manifestación con gran diversidad de situaciones. No solo por características físicas y políticas distintas, sino por su origen y desarrollo. Desde los Estados cuyo objetivo era la unidad antes inexistente (USA) a los paises con organización federal como resultado de la descentralización, que es el caso de España, pero también Rusia o Bélgica.
ResponderEliminarPero el debate muy fuerte iniciado con el federalismo sí que nos lleva a algo esencial: salvar el Estado mismo.Ahora, en estos momentos, éste año y los siguientes,la forma de Estado es inviable porque no se puede financiar. Tiene forma federal pero estructura de unidad. Unidad en el sistema fiscal y en consecuencia en la financiación. La crisis lo ha puesto de manifiesto en toda su crudeza. Desde que comenzó, el gasto no solo disminuyó sino que ha aumentado. La deuda total supera en tres veces el PIB. El rescate supondría una ayuda temporal y en 18 o 36 meses estariamos en situación mucho peor porque no obtendríamos financiación exterior. No existe mas solución que la modificación real de la forma de Estado. O desaparecen las CC.AA.algo impensable, son irreversibles o se reconducen mediante el modelo federal. No hay elección. Es elegir entre mantener el progreso o caer en el subdesarrollo.