SIN PLAN Y CON FRAUDE
Estos estadistas de barrio,
estos patriotas de tres al cuarto, estos gobernantes del desgobierno, en cuanto
los pones ante un juez se les nota el canguelo ideológico y cantan a capela lo
que pueden e incluso lo que deben. Ahí tienen al ilustre Griñán, que presidió
la cosa y la casa, desahogado, en perorata fantasiosa, tratando de hacernos ver
la diferencia sustancial entre el gran fraude que pudo ser y fue – lo sabrá él-
pero sin un gran plan que quiso ser y no pudo, o pudo y no quiso o no consta.
Pues menos mal, aunque agradeciéndole la aclaración debemos convenir con tan
descarado como destacado guardián de las esencias, se trata de un lío lo que
dice, un follón. Pero bueno nosotros no le creemos nada y en paz, aunque lo
dijera por nuestro bien, eso desde luego. Así se preservó la paz más de treinta
años, esa que empieza nunca y él es el López que propuso Klimovsky en su
película tonta donde las haya.
Puesto de manifiesto y
reconocido el fraude, con plan o sin plan, pero enorme, gigantesco, ahora lo
que procede es que cese, que sus causantes y beneficiarios sean democráticamente
juzgados y devuelvan lo robado o malgastado. Pues ni lo piensen. Aquí tomate
hay para repartir lo no repartido y en cuanto a que siga aflorando, pues mejor
tomarlo con tranquilidad porque hasta el momento florece solo una parte, una miaja
y naturalmente Alaya debe continuar su carrera profesional, no va a dedicar
toda una vida a deshacer la madeja imposible del desencanto. El listo Griñán se
lo ha puesto muy difícil al noble panfilismo de Chavez, siempre en busca
incesante de las sucesivas modernizaciones de Andalucía, donde su numerosa
familia ha tenido un papel decisivo, aunque en su momento veamos para quien.
Hoy canta ante los Jueces, pero no sabrá nada. Nunca supo nada ni se enteró de
nada y por eso duró treinta años y lo mismo le daba ser dos veces
Vicepresidente del Gobierno de España, eso sí con ZP, que otras dos Ministro,
que Presidente o Secretario General del PSOE, que Presidente de la Junta durante
19 años. Él estaba sin estar, vivía sin vivir en sí y gobernaba sin que apenas
se notara. Por eso duró toda una vida política, inane, fútil y apenas pudo ver
a cuatro golfos.
Pues nada, los efectos han sido
fulminantes y su ahijada Susana de momento dice que Griñán ya pagó sus
responsabilidades políticas abandonando la Presidencia, claro dejándola a ella.
Pues menudo precio y encima con nuestro dinero. No se si Griñán fue consciente de
lo que hizo y ambos de lo que dicen. De momento las consecuencias apenas
hicieron huella y no tardará en argumentarse que si la justicia emana del
pueblo, en letra de la Constitución, este ya se pronunció hace unos días de
forma inequívoca y ella resultó elegida y sucesora. Está claro que el amor como
el fuego, si no se comunica se apaga.
Entre tanto, la corriente de
amor verdadero se ha hecho intensa, fervorosa, un arte que diría Balzac, entre
el pueblo sencillo y descamisado y la princesa sevillana, llena de gracia y
bravura. El romance de la luna no hizo más que empezar y como ya cantaba García
Lorca, la luna vino a la fragua con su polisón de nardos y Susana la mira mira,
Susana la está mirando. Ya empezó, por ejemplo, con los parados, en conexión
cercana, al considerarlos principales víctimas del sufrimiento infligido por
Rajoy estos tres años y porque resulta llamativa, la escalofriante coincidencia
entre la masa de parados y los votos cosechados. Cada uno de ellos puso su
voto, hasta conseguir el millón cuatrocientos mil de sus triunfo. Pero veremos
como se pandea cuando Rajoy desaparezca del Gobierno de España. Habrá que renovar la
utopía. Pero ojo porque de atender la demanda del comunismo bolivariano y del
otro, movilizado en su extrema izquierda cosa que está al caer, no menos de la
mitad de aquellos se pueden convertir en diligentes empleados públicos, en plan
fortalecedor de una alianza de amor perenne y como plataforma de progreso y desarrollo.
Ellos dicen que todavía hay margen y si no, observen como en Grecia aún no desembarcó
la quinta flota gringa.
De manera que ya digo, aquí
estamos esperando la gran operación de su exaltación al trono andaluz, entre la
envidia y maniobras ocultas de quienes solo quedaron de aspirantes. Ya no
parece posible un gran pacto entre fuerzas constitucionalistas a tres bandas y
menos en el mes del republicanismo, en flor nunca marchita. Solo queda repartir
las migajas de unos puestos en la Mesa del Parlamento eso si bien remunerados,
pero inútiles para evitar la debacle andaluza. Cuando el jueves se constituyan
en asamblea, unos y otros vendrán llorados para que no se les note. Los socialistas
porque el craso error de la convocatoria, sin seguridad de mayoría suficiente, seguramente
retrasará la consumación del susanismo hasta conocer el resultado de las siguientes
elecciones. Ya ven que pastelón. Menudo éxito. Los populares por no creer que
los querían menos que antes, que ya es decir. Los de Ciudadanos y Podemos
porque no terminan de creérselo, que si llegan a intuirlo ponen a candidatos
con alguna solvencia. Claro que aquí no hace falta alguna. Este es pueblo que
lo mueve la poesía.
Si el antecesor de Susana relata
una gran defraudación sin plan, ella seguro será capaz de un plan sin
defraudación. Aunque solo fuera por su inmenso amor por Andalucia, por su
alianza con el pueblo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario